Blao, a raíz de la trastada de García Ferreras, el de la sexta, se acuerda de aquel otro periodista del diario La Verdad de Murcia que fue despedido por Vocento y también vetado por la Asociación de la Prensa, por dar como cierta la noticia de que el Presidente del Cabildo Superior de Cofradías de la capital del sureste español, la noche de un jueves santo en crisis, disfrazado de romano, se hizo con el menú del paso de la Última Cena de Salzillo para dar de comer a su numerosa prole.
Pero lo que de verdad pasó fue que la burra hambrienta del Domingo de Ramos se escapó de la capilla de la iglesia, nuestro Padre de Jesús donde era venerada, y arrambló con todas las ambrosías del Banquete Final. No siempre es cierto lo que publican los medios.
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