¿Os acordáis de aquel afamado escritor tan pudoroso y mojigato, que a lo largo de su vida literaria, en sus siete novelas galardonadas, nunca en ellas cometió ninguna indecencia; y ni siquiera en defensa propia, ni en duelo, ni en escaramuzas mató a ninguno de sus personajes, allí tan vivos y tan bien caracterizados; y sin embargo en su vida real murió a garrote vil por haber asesinado al gobernador con el canto de un libro en la cabeza?
No hay comentarios:
Publicar un comentario