lunes, 2 de junio de 2008

Demagogia poética


Aquel padre poeta que alimentó a su hijo con la música de sus versos hasta matarlo de hambre. La poesía: el invento más hipócrita en boca de quienes prefieren vivir en Babia antes que morder la carne crujiente de una manzana en sazón. La venda que unos ilusos pusieron a la realidad.

Las autoridades debieran prohibir la poesía. El poema es una apología de la mentira, un atentado a la misma esencia de las cosas, un hecho consumado de desrealización ontológica, crimen de lesa naturaleza.

Esta mañana el poeta con el fin de salvar el futuro de su hijo intenta esconder su miedo a la desaceleración de la economía pintando su angustia de sinalefas y metáforas. Se escuda con unos versos que, además de malos, disimulan su pánico a la indigencia.

El poeta esta mañana decide romper sus versos, colgar las botas de sus harapos literarios y apuntarse simplemente a la prosa sin tapujos de Evo Morales:
“Si queremos acabar con la pobreza, eso sólo se hace terminando con el sistema capitalista.”

1 comentario:

  1. Estarías perdido si se prohibiese la poesía. Tus escritos son pura poesía en prosa.

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